viernes, 20 de noviembre de 2009

300 AÑOS DE LA CHINITA




VIRGEN DE CHIQUINQUIRÁ, LA “CHINITA”

El mes de noviembre es de especial significación para el pueblo zuliano, ya que durante el mismo se llevan a cabo las celebraciones en honor de la Chinita (equivalente zuliano de guajirita) o Virgen de la Chiquinquirá. Es por este motivo que durante estos días, la gaita suena con especial frenesí y alegría en todo el Zulia. De las numerosas fiestas en honor a la Virgen, quizás la más impresionante sea el llamado Amanecer Gaitero, en el que el pueblo de Maracaibo se congrega en la madrugada del día 18 en la plazoleta de la Basílica, para cantarle a la Chinita las Mañanitas y el Cumpleaños Feliz.

De acuerdo con la tradición zuliana, la Chinita llegó a Maracaibo sobre las olas del lago. Cuenta la historia que un día del año 1749, una sencilla mujer acababa de lavar su ropa en las orillas del lago de Maracaibo, cuando repentinamente vio flotando una tablita de madera fina, la cual recogió pensando en que le podría ser útil para tapar la tinaja de agua que tenía en el corredor de su casa. A la mañana siguiente, cuando estaba colando el café, la mujer escuchó unos golpes como si alguien estuviera llamando. Fue a ver lo que sucedía y quedó sobrecogida de asombro al ver que la tablita brillaba y que aparecía en ella, la imagen de Nuestra Señora de Chiquinquirá. Por tal motivo, la mujer comenzó a gritar ¡Milagro! ¡Milagro!, por lo que de ahí proviene el nombre de El Milagro a la actual avenida junto al lago, donde estaba la casita de la lavandera. Luego de lo sucedido, numerosas personas acudieron a presenciar el prodigio, convirtiéndose por esto la casa de la humilde mujer en un lugar de veneración de la Virgen por parte de múltiples creyentes.

Al tiempo de lo acontecido en casa de la humilde lavandera, las autoridades de Maracaibo decidieron realizar una procesión en honor de la Chinita. Cuenta la leyenda, que la Virgen era llevada en hombros por dos hombres elegidos por el propio Gobernador, cuando al doblar una esquina, la imagen se puso tan pesada que impidió seguir moviéndola. Finalmente, después de muchos ruegos al cielo y súplicas a la Virgen, uno de los presentes exclamó: "Tal vez la Virgen no quiera ir a la Iglesia Matriz y prefiera la de San Juan de Dios".

Según la tradición popular, estas palabras se tomaron como una inspiración divina, ya que, la procesión cambió su rumbo hacia la iglesia de la gente humilde de Maracaibo y la imagen recuperó su peso normal. Es por esto, que desde ese día, la Virgen de la Chiquinquirá, la querida Chinita, protege desde su templo, hoy basílica, al pueblo zuliano.

En la actualidad la casa donde se efectuó el hallazgo se levanta un majestuoso templo hogar de nuestra Santa Patrona en el cual se celebra el santo sacrificio de la misa y aquella tablita milagrosa en la cual se encuentra reflejada la imagen sagrada, se expone con orgullo en este altar, donde podemos ver con gran claridad la indescriptible y soberana aparición de la Virgen de Chiquinquirá. La calle donde estaba la casa tomó desde ese momento el nombre de Calle del Milagro

jueves, 12 de noviembre de 2009

HISTORIA DE Nª Sª DEL SOCORRO, PATRONA DE VALENCIA

Esta breve reseña es la verdadera historia de lallegada de la imagen de nuestra Virgen del Socorro, que en realidad es la imagen de la Virgen Dolorosa...



sábado, 7 de noviembre de 2009

CAMPAÑA ABRAZO EN FAMILIA 2009



CAMPAÑA ABRAZO EN FAMILIA 2009

Desde hace 19 años se viene celebrando en todas las Diócesis, parroquias, sector educativo público o privado y comunidad en general, la Semana de la Familia, que concluye con el Día Nacional del Abrazo en Familia, celebrado el 2º domingo del mes de Noviembre. Este tiempo de celebración es considerado por el Departamento de Pastoral Familiar de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) como muy especial, debido a que en él se invita a reflexionar, meditar, participar y celebrar desde la realidad familiar, el ser familia, donde nacen, crecen y se forman los nuevos miembros de la Sociedad y de la Iglesia.

Con motivo de la celebración de la Campaña Abrazo en Familia y en el marco de la Misión Continental en Venezuela, se ha escogido para este año como lema “FAMILIA, SÉ DISCÍPULA MISIONERA”, que se celebra del 1º al 8 de noviembre. Con esta temática se pretende que las familias profundicen sobre el significado y la importancia de su ser discípula misionera, procurando a la vez analizar la importancia y el testimonio de vida como transmisora de la fe y transformadora de la sociedad.

Por ello se organizaron talleres y/o encuentros para reflexionar y participar, durante este tiempo propicio, con cada uno de los 5 temas propuestos y desarrollados en la guía del facilitador. También hubo a disposición un afiche, guía del niño, díptico y un CD que contiene todo el material de la Campaña Abrazo en Familia y micros para las emisoras (disponibles en los departamentos de Pastoral Familiar de cada Diócesis), al igual que en la web oficial www.pastoralfamiliarvenezuela.com.

Por tal motivo se invitó a todos los agentes de pastoral familiar, sacerdotes, religiosos(sas), catequista, laicos comprometidos, educadores, etc. para que dediquen sus mayores y mejores esfuerzos por llevar esta campaña a las familias, centros educativos, parroquias, programas de radio, prensa escrita, televisión, páginas web y en todo espacio en donde se dé a conocer.

Pido a la Sagrada Familia de Nazaret que bendiga a todas las familias de Venezuela, e infunda a todos los agentes de pastoral familiar un ardor misionero en pro de las familias.

Padre Antonio J. Velázquez D.

Director Depto. Pastoral Familiar e Infancia de la CEV

viernes, 30 de octubre de 2009

SOLEMNIDAD DE TODOS LOS SANTOS



Este día se celebran a todos los millones de personas que han llegado al cielo, aunque sean desconocidos para nosotros. Santo es aquel que ha llegado al cielo, algunos han sido canonizados y son por esto propuestos por la Iglesia como ejemplos de vida cristiana.

Comunión de los santos

La comunión de los santos, significa que ellos participan activamente en la vida de la Iglesia, por el testimonio de sus vidas, por la transmisión de sus escritos y por su oración. Contemplan a Dios, lo alaban y no dejan de cuidar de aquellos que han quedado en la tierra. La intercesión de los santos significa que ellos, al estar íntimamente unidos con Cristo, pueden interceder por nosotros ante el Padre. Esto ayuda mucho a nuestra debilidad humana.

Su intercesión es su más alto servicio al plan de Dios. Podemos y debemos rogarles que intercedan por nosotros y por el mundo entero.

Aunque todos los días deberíamos pedir la ayuda de los santos, es muy fácil que el ajetreo de la vida nos haga olvidarlos y perdamos la oportunidad de recibir todas las gracias que ellos pueden alcanzarnos. Por esto, la Iglesia ha querido que un día del año lo dediquemos especialmente a rezar a los santos para pedir su intercesión. Este día es el 1ro. de noviembre.

Este día es una oportunidad que la Iglesia nos da para recordar que Dios nos ha llamado a todos a la santidad. Que ser santo no es tener una aureola en la cabeza y hacer milagros, sino simplemente hacer las cosas ordinarias extraordinariamente bien, con amor y por amor a Dios. Que debemos luchar todos para conseguirla, estando conscientes de que se nos van a presentar algunos obstáculos como nuestra pasión dominante; el desánimo; el agobio del trabajo; el pesimismo; la rutina y las omisiones.

Se puede aprovechar esta celebración para hacer un plan para alcanzar la santidad y poner los medios para lograrlo:


¿Como alcanzar la santidad?

- Detectando el defecto dominante y planteando metas para combatirlo a corto y largo plazo.

- Orando humildemente, reconociendo que sin Dios no podemos hacer nada.

- Acercándonos a los sacramentos.


Un poco de historia

La primera noticia que se tiene del culto a los mártires es una carta que la comunidad de Esmirna escribió a la Iglesia de Filomelio, comunicándole la muerte de su santo obispo Policarpo, en el año156. Esta carta habla sobre Policarpo y de los mártires en general. Del contenido de este documento, se puede deducir que la comunidad cristiana veneraba a sus mártires, que celebraban su memoria el día del martirio con una celebración de la Eucaristía. Se reunían en el lugar donde estaban sus tumbas, haciendo patente la relación que existe entre el sacrificio de Cristo y el de los mártires.

La veneración a los santos llevó a los cristianos a erigir sobre las tumbas de los mártires, grandes basílicas como la de San Pedro en la colina del Vaticano, la de San Pablo, la de San Lorenzo, la de San Sebastián, todos ellos en Roma.

Las historias de los mártires se escribieron en unos libros llamados Martirologios que sirvieron de base para redactar el Martirologio Romano, en el que se concentró toda la información de los santos oficialmente canonizados por la Iglesia.

Cuando cesaron las persecuciones, se unió a la memoria de los mártires el culto de otros cristianos que habían dado testimonio de Cristo con un amor admirable sin llegar al martirio, es decir, los santos confesores. En el año 258, San Cipriano, habla del asunto, narrando la historia de los santos que no habían alcanzado el martirio corporal, pero sí confesaron su fe ante los perseguidores y cumplieron condenas de cárcel por Cristo.

Más adelante, aumentaron el santoral con los mártires de corazón. Estas personas llevaban una vida virtuosa que daba testimonio de su amor a Cristo. Entre estos, están san Antonio (356) en Egipto y san Hilarión (371) en Palestina. Tiempo después, se incluyó en la santidad a las mujeres consagradas a Cristo. Antes del siglo X, el obispo local era quien determinaba la autenticidad del santo y su culto público. Luego se hizo necesaria la intervención de los Sumos Pontífices, quienes fueron estableciendo una serie de reglas precisas para poder llevar a cabo un proceso de canonización, con el propósito de evitar errores y exageraciones.

El Concilio Vaticano II reestructuró el calendario del santoral:

Se disminuyeron las fiestas de devoción pues se sometieron a revisión crítica las noticias hagiográficas (se eliminaron algunos santos no porque no fueran santos sino por la carencia de datos históricos seguros); se seleccionaron los santos de mayor importancia (no por su grado de santidad, sino por el modelo de santidad que representan: sacerdotes, casados, obispos, profesionistas, etc.); se recuperó la fecha adecuada de las fiestas (esta es el día de su nacimiento al Cielo, es decir, al morir); se dio al calendario un carácter más universal (santos de todos los continentes y no sólo de algunos).



Categorías de culto católico

Los católicos distinguimos tres categorías de culto:

- Latría o Adoración: Latría viene del griego latreia, que quiere decir servicio a un amo, al señor soberano. El culto de adoración es el culto interno y externo que se rinde sólo a Dios.

- Dulía o Veneración: Dulía viene del griego doulos que quiere decir servidor, servidumbre. La veneración se tributa a los siervos de Dios, los ángeles y los bienaventurados, por razón de la gracia eminente que han recibido de Dios. Este es el culto que se tributa a los santos. Nos encomendamos a ellos porque creemos en la comunión y en la intercesión de los santos, pero jamás los adoramos como a Dios. Tratamos sus imágenes con respeto, al igual que lo haríamos con la fotografía de un ser querido. No veneramos a la imagen, sino a lo que representa.

- Hiperdulía o Veneración especial: Este culto lo reservamos para la Virgen María por ser superior respecto a los santos. Con esto, reconocemos su dignidad como Madre de Dios e intercesora nuestra. Manifestamos esta veneración con la oración e imitando sus virtudes, pero no con la adoración.

lunes, 19 de octubre de 2009

Santa María de Guadalupe




(Tomado de: http://www.aciprensa.com/Maria/Guadalupe/guadalupe.htm)

Un sábado de 1531 a principios de diciembre, un indio llamado Juan Diego, iba muy de madrugada del pueblo en que residía a la ciudad de México a asistir a sus clases de catecismo y a oír la Santa Misa. Al llegar junto al cerro llamado Tepeyac amanecía y escuchó una voz que lo llamaba por su nombre.

Él subió a la cumbre y vio a una Señora de sobrehumana belleza, cuyo vestido era brillante como el sol, la cual con palabras muy amables y atentas le dijo: "Juanito: el más pequeño de mis hijos, yo soy la siempre Virgen María, Madre del verdadero Dios, por quien se vive. Deseo vivamente que se me construya aquí un templo, para en él mostrar y prodigar todo mi amor, compasión, auxilio y defensa a todos los moradores de esta tierra y a todos los que me invoquen y en Mí confíen. Ve donde el Señor Obispo y dile que deseo un templo en este llano. Anda y pon en ello todo tu esfuerzo".

De regresó a su pueblo Juan Diego se encontró de nuevo con la Virgen María y le explicó lo ocurrido. La Virgen le pidió que al día siguiente fuera nuevamente a hablar con el obispo y le repitiera el mensaje. Esta vez el obispo, luego de oír a Juan Diego le dijo que debía ir y decirle a la Señora que le diese alguna señal que probara que era la Madre de Dios y que era su voluntad que se le construyera un templo.

De regreso, Juan Diego halló a María y le narró los hechos. La Virgen le mandó que volviese al día siguiente al mismo lugar pues allí le daría la señal. Al día siguiente Juan Diego no pudo volver al cerro pues su tío Juan Bernardino estaba muy enfermo. La madrugada del 12 de diciembre Juan Diego marchó a toda prisa para conseguir un sacerdote a su tío pues se estaba muriendo. Al llegar al lugar por donde debía encontrarse con la Señora prefirió tomar otro camino para evitarla. De pronto María salió a su encuentro y le preguntó a dónde iba. El indio avergonzado le explicó lo que ocurría. La Virgen dijo a Juan Diego que no se preocupara, que su tío no moriría y que ya estaba sano. Entonces el indio le pidió la señal que debía llevar al obispo. María le dijo que subiera a la cumbre del cerro donde halló rosas de Castilla frescas y poniéndose la tilma, cortó cuantas pudo y se las llevó al obispo.

Una vez ante Monseñor Zumarraga Juan Diego desplegó su manta, cayeron al suelo las rosas y en la tilma estaba pintada con lo que hoy se conoce como la imagen de la Virgen de Guadalupe. Viendo esto, el obispo llevó la imagen santa a la Iglesia Mayor y edificó una ermita en el lugar que había señalado el indio.

Pio X la proclamó como "Patrona de toda la América Latina", Pio XI de todas las "Américas", Pio XII la llamó "Emperatriz de las Américas" y Juan XXIII "La Misionera Celeste del Nuevo Mundo" y "la Madre de las Américas".

La imagen de la Virgen de Guadalupe se venera en México con grandísima devoción, y los milagros obtenidos por los que rezan a la Virgen de Guadalupe son extraordinarios.

Oración a la Virgen de Guadalupe




¡Oh Virgen Inmaculada, Madre del verdadero Dios y Madre de la Iglesia! Tú, que desde este lugar manifiestas tu clemencia y tu compasión a todos los que solicitan tu amparo; escucha la oración que con filial confianza te dirigimos y preséntala ante tu Hijo Jesús, único Redentor nuestro.

Madre de misericordia, Maestra del sacrificio escondido y silencioso, a ti, que sales al encuentro de nosotros, los pecadores, te consagramos en este día todo nuestro ser y todo nuestro amor. Te consagramos también nuestra vida, nuestros trabajos, nuestras alegrías, nuestras enfermedades y nuestros dolores.
Da la paz, la justicia y la prosperidad a nuestros pueblos; ya que todo lo que tenemos y somos lo ponemos bajo tu cuidado, Señora y Madre nuestra.
Queremos ser totalmente tuyos y recorrer contigo el camino de una plena fidelidad a Jesucristo en su Iglesia: no nos sueltes de tu mano amorosa.
Virgen de Guadalupe, Madre de las Américas, te pedimos por todos los Obispos, para que conduzcan a los fieles por senderos de intensa vida cristiana, de amor y de humilde servicio a Dios y a las almas.

Contempla esta inmensa mies, e intercede para que el Señor infunda hambre de santidad en todo el Pueblo de Dios, y otorga abundantes vocaciones de sacerdotes y religiosos, fuertes en la fe, y celosos dispensadores de los misterios de Dios.

Concede a nuestros hogares la gracia de amar y de respetar la vida que comienza, con el mismo amor con el que concebiste en tu seno la vida del Hijo de Dios. Virgen Santa María, Madre del Amor Hermoso, protege a nuestras familias, para que estén siempre muy unidas, y bendice la educación de nuestros hijos.
Esperanza nuestra, míranos con compasión, enséñanos a ir continuamente a Jesús y, si caemos, ayúdanos a levantarnos, a volver a él, mediante la confesión de nuestras culpas y pecados en el Sacramento de la Penitencia, que trae sosiego al alma.

Te suplicamos, que nos concedas un amor muy grande a todos los santos Sacramentos, que son como las huellas que tu Hijo nos dejó en la tierra.
Así, Madre Santísima, con la paz de Dios en la conciencia, con nuestros corazones libres de mal y de odios podremos llevar a todos la verdadera alegría y la verdadera paz, que vienen de tu Hijo, nuestro Señor Jesucristo, que con Dios Padre y con el Espíritu Santo, vive y reina por los siglos de los siglos. Amén.

ACRÓSTICO PARA LA VIRGEN DE GUADALUPE

ACRÓSTICO PARA LA VIRGEN DE GUADALUPE

Generosa y magnánima Señora

Unida a tu pueblo por tu Hijo.

Amorosa y protectora madrecita,

Dulzura y piedad, tu corazón es de

América Latina, a ti volcada y guiada hacia la

Luz que refulge en tu sonrisa.

Urgidos de tu Amor en ti buscamos

Paz y serenidad, calma y consuelo, y

Esperanza en tu ejemplo, manso y humilde…



PROF. ALEXIS GONZÁLEZ G.






Iglesia del Carrizal, El Carrizal, Edo. Falcón



Entrando a la Iglesia del Carrizal, encontrarás la siguiente leyenda:

"Este santuario relicario de nuestro Pueblo, está erigido en el mismo lugar en que nuestros antecesores levantaron el primer Templo Doctrinero en 1723 en honor a Nuestra Señora de Guadalupe"


¿Sabías que la imagen de la Virgen de Guadalupe que se encuentra en el altar llega en 1723 a las playas cercanas de la región desde un buque naufragiado?... En ese entonces, los indígenas, nativos de la región, rescataron la imagen de la Virgen de las aguas y quedaron impactados al ver que Ella poseía rasgos físicos muy parecidos a los de ellos. En ese momento, Indígenas de todos los alrededores, fueron a ver la imagen de la Virgen y conocerle.

Hoy en día, devotos de la Virgen de Guadalupe de Carrizal se congregan para venerarle y darle Gracias a la Virgen por milagros y favores concedidos. La Fiesta de la Virgen de Guadalupe del Carrizal es el 12 de Diciembre.

domingo, 11 de octubre de 2009

Beato Juan XXIII, el Papa Bueno




Nació en el seno de una numerosa familia campesina, de profunda raigambre cristiana. Pronto ingresó en el Seminario, donde profesó la Regla de la Orden franciscana seglar. Ordenado sacerdote, trabajó en su diócesis hasta que, en 1921, se puso al servicio de la Santa Sede. En 1958 fue elegido Papa, y sus cualidades humanas y cristianas le valieron el nombre de "papa bueno". Juan Pablo II lo beatificó el año 2000 y estableció que su fiesta se celebre el 11 de octubre.

Nació el día 25 de noviembre de 1881 en Sotto il Monte, diócesis y provincia de Bérgamo (Italia). Ese mismo día fue bautizado, con el nombre de Ángelo Giuseppe. Fue el cuarto de trece hermanos. Su familia vivía del trabajo del campo. La vida de la familia Roncalli era de tipo patriarcal. A su tío Zaverio, padrino de bautismo, atribuirá él mismo su primera y fundamental formación religiosa. El clima religioso de la familia y la fervorosa vida parroquial, fueron la primera y fundamental escuela de vida cristiana, que marcó la fisonomía espiritual de Ángelo Roncalli.


Recibió la confirmación y la primera comunión en 1889 y, en 1892, ingresó en el seminario de Bérgamo, donde estudió hasta el segundo año de teología. Allí empezó a redactar sus apuntes espirituales, que escribiría hasta el fin de sus días y que han sido recogidos en el «Diario del alma». El 1 de marzo de 1896 el director espiritual del seminario de Bérgamo lo admitió en la Orden franciscana seglar, cuya Regla profesó el 23 de mayo de 1897.


De 1901 a 1905 fue alumno del Pontificio seminario romano, gracias a una beca de la diócesis de Bérgamo. En este tiempo hizo, además, un año de servicio militar. Fue ordenado sacerdote el 10 de agosto de 1904, en Roma. En 1905 fue nombrado secretario del nuevo obispo de Bérgamo, Mons. Giácomo María Radini Tedeschi. Desempeñó este cargo hasta 1914, acompañando al obispo en las visitas pastorales y colaborando en múltiples iniciativas apostólicas: sínodo, redacción del boletín diocesano, peregrinaciones, obras sociales. A la vez era profesor de historia, patrología y apologética en el seminario, asistente de la Acción católica femenina, colaborador en el diario católico de Bérgamo y predicador muy solicitado por su elocuencia elegante, profunda y eficaz.


En aquellos años, además, ahondó en el estudio de tres grandes pastores: san Carlos Borromeo (de quien publicó las Actas de la visita apostólica realizada a la diócesis de Bérgamo en 1575), san Francisco de Sales y el entonces beato Gregorio Barbarigo. Tras la muerte de Mons. Radini Tedeschi, en 1914, don Ángelo prosiguió su ministerio sacerdotal dedicado a la docencia en el seminario y al apostolado, sobre todo entre los miembros de las asociaciones católicas.


En 1915, cuando Italia entró en guerra, fue llamado como sargento sanitario y nombrado capellán militar de los soldados heridos que regresaban del frente. Al final de la guerra abrió la «Casa del estudiante» y trabajó en la pastoral de estudiantes. En 1919 fue nombrado director espiritual del seminario.


En 1921 empezó la segunda parte de la vida de don Ángelo Roncalli, dedicada al servicio de la Santa Sede. Llamado a Roma por Benedicto XV como presidente para Italia del Consejo central de las Obras pontificias para la Propagación de la fe, recorrió muchas diócesis de Italia organizando círculos de misiones. En 1925 Pío XI lo nombró visitador apostólico para Bulgaria y lo elevó al episcopado asignándole la sede titular de Areópoli. Su lema episcopal, programa que lo acompañó durante toda la vida, era: «Obediencia y paz».


Tras su consagración episcopal, que tuvo lugar el 19 de marzo de 1925 en Roma, inició su ministerio en Bulgaria, donde permaneció hasta 1935. Visitó las comunidades católicas y cultivó relaciones respetuosas con las demás comunidades cristianas. Actuó con gran solicitud y caridad, aliviando los sufrimientos causados por el terremoto de 1928. Sobrellevó en silencio las incomprensiones y dificultades de un ministerio marcado por la táctica pastoral de pequeños pasos. Afianzó su confianza en Jesús crucificado y su entrega a él.


En 1935 fue nombrado delegado apostólico en Turquía y Grecia. Era un vasto campo de trabajo. La Iglesia católica tenía una presencia activa en muchos ámbitos de la joven república, que se estaba renovando y organizando. Mons. Roncalli trabajó con intensidad al servicio de los católicos y destacó por su diálogo y talante respetuoso con los ortodoxos y con los musulmanes. Cuando estalló la segunda guerra mundial se hallaba en Grecia, que quedó devastada por los combates. Procuró dar noticias sobre los prisioneros de guerra y salvó a muchos judíos con el «visado de tránsito» de la delegación apostólica. En diciembre de 1944 Pío XII lo nombró nuncio apostólico en París.


Durante los últimos meses del conflicto mundial, y una vez restablecida la paz, ayudó a los prisioneros de guerra y trabajó en la normalización de la vida eclesiástica en Francia. Visitó los grandes santuarios franceses y participó en las fiestas populares y en las manifestaciones religiosas más significativas. Fue un observador atento, prudente y lleno de confianza en las nuevas iniciativas pastorales del episcopado y del clero de Francia. Se distinguió siempre por su búsqueda de la sencillez evangélica, incluso en los asuntos diplomáticos más intrincados. Procuró actuar como sacerdote en todas las situaciones. Animado por una piedad sincera, dedicaba todos los días largo tiempo a la oración y la meditación. En 1953 fue creado cardenal y enviado a Venecia como patriarca. Fue un pastor sabio y resuelto, a ejemplo de los santos a quienes siempre había venerado, como san Lorenzo Giustiniani, primer patriarca de Venecia.


Tras la muerte de Pío XII, fue elegido Papa el 28 de octubre de 1958, y tomó el nombre de Juan XXIII. Su pontificado, que duró menos de cinco años, lo presentó al mundo como una auténtica imagen del buen Pastor. Manso y atento, emprendedor y valiente, sencillo y cordial, practicó cristianamente las obras de misericordia corporales y espirituales, visitando a los encarcelados y a los enfermos, recibiendo a hombres de todas las naciones y creencias, y cultivando un exquisito sentimiento de paternidad hacia todos. Su magisterio, sobre todo sus encíclicas «Pacem in terris» y «Mater et magistra», fue muy apreciado.


Convocó el Sínodo romano, instituyó una Comisión para la revisión del Código de derecho canónico y convocó el Concilio ecuménico Vaticano II. Visitó muchas parroquias de su diócesis de Roma, sobre todo las de los barrios nuevos. La gente vio en él un reflejo de la bondad de Dios y lo llamó «el Papa de la bondad». Lo sostenía un profundo espíritu de oración. Su persona, iniciadora de una gran renovación en la Iglesia, irradiaba la paz propia de quien confía siempre en el Señor. Falleció la tarde del 3 de junio de 1963.


Juan Pablo II lo beatificó el 3 de septiembre del año 2000, y estableció que su fiesta se celebre el 11 de octubre, recordando así que Juan XXIII inauguró solemnemente el Concilio Vaticano II el 11 de octubre de 1962.

sábado, 19 de septiembre de 2009




Decálogo para leer con provecho la Biblia

SOctubre: mes de la Biblia

01. Nunca creer que somos los primeros que han leído la Santa Escritura. Muchos, muchísimos a través de los siglos la han leído, meditado, vivido, transmitido. Los mejores intérpretes de la Biblia son los santos.

02. La Escritura es el libro de la comunidad eclesial. Nuestra lectura, aunque sea a solas, jamás podrá ser en solitario. Para leerla con provecho, hay que insertarse en la gran corriente eclesial que conduce y guía el Espíritu Santo.

03. La Biblia es “Alguien”. Por eso se lee y celebra a la vez. La lectura mejor de la Biblia es la que se hace en la Liturgia.

04. El centro de la Santa Escritura es Cristo; por eso, todo debe leerse bajo la mirada de Cristo y cumplido en Cristo. Cristo es la clave interpretativa de la Santa Escritura.

05. Nunca olvidar que en la Biblia encontramos hechos y dichos, obras y palabras íntimamente unidas unas con otras; las palabras anuncian e iluminan los hechos, y los hechos realizan y confirman las palabras.

06. Una manera práctica y provechosa de leer la Escritura es comenzar con los santos Evangelios, seguir con los Hechos y las Cartas e ir entreverando con algún libro del Antiguo Testamento: Génesis, Éxodo, Jueces, Samuel, etcétera... No querer leer el libro del Levítico de corrido, por ejemplo. Los Salmos deben ser el libro de oración de los grupos bíblicos. Los profetas son el “alma del Antiguo Testamento: hay que dedicarles un estudio especial.

07. La Biblia se conquista como la ciudad de Jericó: dándole vueltas. Por eso, es bueno leer los lugares paralelos. Es un método entretenido, pero muy provechoso. Un texto esclarece al otro, según aquello de San Agustín: “El Antiguo Testamento queda patente en el Nuevo y el Nuevo está latente en el Antiguo”.

08. La Biblia debe leerse y meditarse con el mismo Espíritu con que fue escrita. El Espíritu Santo es su autor principal y es su principal intérprete. Hay que invocarlo siempre antes de comenzar a leerla y al final, dar gracias.

09. Nunca debe utilizarse la Santa Biblia para criticar y condenar a los demás.

10. Todo texto bíblico tiene un contexto histórico donde se originó y un contexto literario donde se escribió. Un texto bíblico, fuera de su contexto histórico y literario, es un pretexto para manipular la Palabra de Dios. Esto es tomar el nombre de Dios en vano.

Mario De Gasperín Gasperín

Obispo de Querétaro




Padres venezolanos se movilizan para que no se elimine religión en escuelas

CARACAS, Septiembre 2009 (ACI)

La Coordinación Nacional de Educación Religiosa Escolar lanzó una campaña entre los padres de familia venezolanos para que exijan en las escuelas a las que asisten sus hijos, la enseñanza del curso de religión. Ante el riesgo de que al aplicar la nueva Ley Orgánica de Educación se elimine esta asignatura, la Coordinación recuerda que la enseñanza de religión es un derecho contemplado en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y la Ley Orgánica de Protección al Niño, Niña y Adolescente.


"Recordamos a las autoridades educativas su deber de garantizar este derecho para todos los estudiantes cuyas familias lo soliciten, evitando interpretaciones personales que entorpezcan esta actividad", solicita la entidad. Asimismo, recuerda que "como parte de la sociedad civil, corresponsables también de la tarea educativa, ponemos a disposición de los docentes comprometidos con este hermoso reto los contenidos de clase, los métodos apropiados, el material didáctico y cursos bíblicos para que con su iniciativa, creatividad, competencia y entusiasmo puedan responder a este derecho de nuestros estudiantes y lograr un mejor trabajo docente con el amor, la justicia y la paz de Dios en nuestras aulas".


En este sentido, invita "a las familias venezolanas a solicitar en los planteles, con el apoyo de los consejos comunales, los colectivos internos de la escuela y los demás actores comunitarios, la educación religiosa para sus hijos e hijas de acuerdo a sus convicciones y durante los 200 días de clase, con la seguridad de que el rescate y fortalecimiento de los valores humanos y cristianos ayudarán de manera decisiva en la formación de mejores ciudadanos y ciudadanas para nuestro país".


"Así lo proclamó nuestro Libertador Simón Bolívar muchísimas veces instando a los maestros y hasta cambiando el currículo para que los estudiantes recibieran clases de religión como medio para superar las crisis de valores, como cuando proclamó que 'sin la conciencia de la religión la moral carece de base' (octubre de 1828) o indicó a los maestros de su sobrino Fernando que 'la moral en máximas religiosas es una enseñanza que ningún maestro debe descuidar'", concluye el comunicado.



La Coordinación Nacional de Educación Religiosa Escolar ha difundido una planilla para que los padres de familia entreguen en sus respectivos planteles. Éste es el texto modelo:


Por la presente solicitamos y autorizamos la educación religiosa en el horario escolar para nuestro(a) hijo(a) _____________________________________ cursante del _____ grado de Educación ________________________, para que a través de esta educación se fortalezcan sus valores morales y cívicos.


Esta solicitud la hacemos amparados en las siguientes leyes:


Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, artículo 59:
  Derecho a elegir la educación religiosa de nuestros hijos e hijas.


Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, artículo 103: Derecho a una educación integral de calidad.


Ley Orgánica de Protección a los Niños, Niñas y Adolescentes, artículo 35: Derecho a la libertad de conciencia, pensamiento y religión.


Nombre: ____________________________ Cédula: ______________ Firma: ___________

sábado, 29 de agosto de 2009

LA ÚNICA IGLESIA QUE CRISTO FUNDÓ Y SUS PASTORES



¿SABES QUIÉN FUNDÓ TU IGLESIA?

AQUÍ TE ENTERARÁS DE LA VERDAD ACERCA DE PORQUIÉN, CUÁNDO Y DÓNDE

FUERON FUNDADAS LAS DIFERENTES CREENCIAS

Religión

Fundador

Lugar

Año

CATÓLICA

Jesucristo

Galilea

33

ADVENTISTA

William Miller

EE.UU.

1818

ADVENTISTA DEL 7° DÍA

Elena White

EE.UU.

1863

ANGLICANA

Enrique VIII

Inglaterra

1534

BAUTISTA

J. Smith

Inglaterra

1860

EJÉRCITO DE SALVACIÓN

William Booth

Inglaterra

1878

ESPIRITISMO

Familia Fox

EE.UU.

1848

LUTERANA

Martín Lutero

Alemania

1521

METODISTA

J. Wesley

EE.UU.

1791

MORMONA

Joseph Smith

EE.UU.

1853

NIÑOS DE DIOS

David Berg

EE.UU.

1950

PENTECOSTAL

Grupo USA

EE.UU.

1905

PRESBITERIANA

John Knox – I

Inglaterra

1560

TESTIGOS DE JEHOVÁ

Charles Taze Russel

EE.UU.

1876


Sí, la Iglesia Católica es la única que fue fundada por nuestro Señor Jesucristo, sobre el Apóstol San Pedro y que perdurará hasta el fin del mundo. La única que tiene 2000 años de antigüedad. La única que tiene la plenitud de los medios de salvación dejados por Jesucristo.

Jesús no delegó ni autorizó a nadie más que a Pedro para ser piedra de cimiento de su Iglesia. Por tanto, todos los fundadores de iglesias que aparecieron posteriormente, contravienen la expresa voluntad de Jesús.

Jesús dijo: “Yo estoy con ustedes todos los días” (Mt. 28, 20). Y esta presencia de Jesús se ha mantenido y guardado hasta hoy en toda su integridad sólo en la Iglesia Católica, ya que es la única que ha perdurado sin interrupción desde su fundación hasta nuestros días.

Jesús le dijo a Pedro: “Y ahora Yo te digo que tú eres Pedro –o sea, Piedra– y sobre esta piedra edificaré mi Iglesi y los poderes del infierno no la podrán vencer” (Mt. 16, 18). Y Pedro hoy está representado por el Papa, Pastor de la Iglesia Universal. He aquí la sucesión de los 265 Papas desde Pedro hasta Benedicto XVI:

01.-San Pedro (Simón Bar Jona). 02.- San Lino, Tuscany (67-76). 03.- San Anacleto (Cleto), Roma (76-88). 04.- San Clemente I (88-97). 05.- San Evaristo, Grecia (97-105). 06.- San Alejandro I, Roma (105-115). 07.- San Sixto I, Roma (115-125). 08.- San Telésforo, Grecia (125-136). 09.- San Iginio, Grecia (136-140). 10.- San Pío I, Aquileia (140-155). 11.- San Aniceto, Siria, (155-166). 12.- San Sotero, Campania, (166-175). 13.- San Eleuterio, Grecia, (175-189). 14.- San Víctor I, Africa (189-199). 15.- San Ceferino (199-217). 16.- San Calixto I, (217-222). 17.- San Urbano I (222-230). 18.- San Ponciano (230-235). 19.- San Anterus, Grecia (235). 20.- San Fabián (236-250). 21.- San Cornelio (251-253). 22.- San Lucio I (253-254). 23.- San Esteban I (254-257). 24.- San Sixto II, Grecia (257-258). 25.- San Dionisio (259-268). 26.- San Félix I (269-274). 27.- San Eutiquiano (275-283). 28.- San Cayo (Dalmacia) (283-296). 29.- San Marcelino (296-304). 30.- San Marcelo I (308-309). 31.- San Eusebio, Grecia (309-309). 32.- San Melquiades, Africa (311-314). 33.- San Silvestre I (314-335). 34.- San Marcos (336-336). 35.- San Julio I (337-352). 36.- San Liberio (352-366). 37.- San Dámaso I, España (366-384). 38.- San Siricio (384-399). 39.- San Anastasio I (399-401). 40.- San Inocencio I (401-417). 41.- San Zósimo, Grecia (417-418). 42.- San Bonifacio I (418-422). 43.- San Celestino I (422-432). 44.- San Sixto III (432-440). 45.- San León I (el grande) (440-461). 46.- San Hilarión (461-468). 47.- San Simplicio (468-483). 48.- San Felix III (ahora II) (483-492). 49.- San Gelasio I, Africa (492-496). 50.- Anastasio II (496-498). 51.- San Simaco (498-514). 52.- San Omisdas (514-523). 53.- San Juan I (523-526). 54.- San Felix IV (ahora III) (526-530). 55.- Bonifacio II (530-532). 56.- Juan II (533-535). 57.- San Agapito I (Mayo 13, 535-Abril 22, 536). 58.- San Silverio (536-537). 59.- Vigilio (537-555). 60.- Pelayo I (556-561). 61.- Juan III (561-574). 62.- Benedicto I (575-579). 63.- Pelayo II (579-590). 64.- San Gregorio I, el Grande (590-604). 65.- Sabino (Setiembre 13, 604-Febrero 22, 606). 66.- Bonifacio III (Febrero 19, 607-Noviembre 12, 607). 67.- San Bonifacio IV (608-615). 68.- San Deusdedito o Adeodato I (615-618). 69.- Bonifacio V (619-625). 70.- Honorio I (625-638). 71.- Severino (640-640). 72.- Juan IV, Dalmacia (640-642). 73.- Teodoro I, Grecia (642-649). 74.- San Martin I (649-655) (exiliado Junio 17, 655). 75.- San Eugenio I (654-657). 76.- San Vitaliano (657-672). 77.- Adeodato II (672-676). 78.- Dono (676-678). 79.- San Agatón (Junio 27, 678-Enero 10, 681). 80.- San León II (682-683). 81.- San Benedicto II (684-685). 82.-Juan V (Siria) (685-686). 83.- Conono (686-687). 84.- San Sergio I , Siria (687-701). 85.- Juan VI (Grecia) (701-705). 86.- Juan VII (Grecia) (705-707). 87.- Sisino (Siria) (708-708). 88.- Constantino, Siria (708-715). 89.- San Gregorio II (715-731). 90.- San Gregorio III, Siria (731-741). 91.- San Zacarías, Grecia (741-752). 92.- Esteban II (III) (752-757). 93.- San Pablo I (757-767). 94.- Esteban III (IV) (768-772). 95.- Adrián I (772-795). 96.- San León III (795-816). 97.- Esteban IV (V) (816-817). 98.- San Pascual I (817-824). 99.- Eugenio II (824-827). 100.- Valentín (827-827). 101.- Gregorio IV (827-844). 102.- Sergio II (844-847). 103.- San León IV (847-855). 104.- Benedicto III (855-858). 105.- San Nicolás I (el Grande) (858-867). 106.- Adrián II (867-872). 107.- Juan VIII (872-882). 108.- Marino I (882-884). 109.- San Adrián III (884-885). 110.- Esteban V (VI) (885-891). 111.- Formoso (891-896). 112.- Bonifacio VI (896). 113.- Esteban VI (VII) (Mayo 896-Agosto 897). 114.- Romano (897-897). 115.- Teodoro II (897). 116.- Juan IX (898-900). 117.- Benedicto IV (900-903). 118.- León V (903). 119.- Sergio III (904-911). 120.- Anastasio III (911-913). 121.- Landón (913-914). 122.- Juan X (914-928). 123.- León VI (928). 124.- Esteban VII (VIII) (928-931). 125.- Juan XI (931-935). 126.- León VII (936-939). 127.- Esteban VIII (IX) (939-942). 128.- Marino II (942-946). 129.- Agapito II (946-955). 130.- Juan XII (955-964). 131.- León VIII (963-965). 132.- Benedicto V (964-966). 133.- Juan XIII (965-972). 134.- Benedicto VI (973-974). 135.- Benedicto VII (974-983). 136.- Juan XIV (983-984). 137.- Juan XV (985-996). 138.- Gregorio V (Saxon) (996-999). 139.- Silvestre II (Francia) (999-1003). 140.- Juan XVII (1003). 141.- Juan XVIII (1004-1009). 142.- Sergio IV (1009-1012). 143.- Benedicto VIII (1012-1024). 144.- Juan XIX (1024-1032). 145.- Benedicto IX (1032-1044). 146.- Silvestre III (1045). 147.- Benedicto IX (segundo período) (1045-1045)-. 148.- Gregorio VI (1045-1046). 149.- Clemente II, Sajonia (1046-1047). 150.- Benedicto IX (tercer período) (1047-1048) (d. C. 1055). 151.- Dámaso II, Bavaria (1048-1048). 152.- San León IX, Alsacia (1049-1057). 153.- Víctor II, Suavia (1055-1057). 154.- Esteban IX (X), Francia (1057-1058). 155.- Nicolás II, Francia (1059-1061). 156.- Alejandro II (1061-1073). 157.- San Gregorio VII (1073-1085). 158.- Beato Víctor III (1086-1087). 159.- Beato Urbano II, Francia (1088-1099). 160.- Pascual II (1099-1118). 161.- Gelasio II (Marzo 10, 1118-Enero 28, 1119). 162.- Calixto II (Febrero 8, 1119-Diciembre 13, 1124). 163.- Honorio II (1124-1130). del Emperador).. 164.- Inocencio II (1130-1143). 165.- Celestino II (1143-1144). 166.- Lucio II (1144-1145). 167.- Beato Eugenio III (1145-1153). 168.- Anastasio IV (1153-1154). 169.- Adrián IV, Inglaterra (1154-1159). 170.- Alejandro III (1159-1181). 171.- Lucio III (1181-1185). 172.- Urbano III (1185-1187). 173.- Gregorio VIII (1187). 174.- Clemente III (1187-1191). 175.- Celestino III (1191-1198). 176.- Inocencio III (1198-1216). 177.- Honorio III (1216-1227). 178.- Gregorio IX (1227-1241). 179.- Celestino IV (1241). 180.- Inocencio IV (1243-1254). 181.- Alejandro IV (Diciembre 12, 1254-Mayo 25, 1261). 182.- Urbano IV (1261-1264). 183.- Clemente IV (1265-1268). 184.- Beato Gregorio X (1272-1276). 185.- Beato Inocencio V, Francia (1276). 186.- Adrián V (1276). 187.- Juan XXI (1276-1277). 188.- Nicolás III (1277-1280). 189.- Martin IV (1281-1285). 190.- Honorio IV (1285-1287). 191.- Nicolás IV (1288-1292). 192.- San Celestino V (1294-Diciembre 13, 1294 [renunció]; muriò el Mayo 19, 1296). 193.- Bonifacio VIII (1294-1303). 194.- Beato Benedicto XI (1303-1304). Durante este periódo los papas residen en Avignon: 195.- Clemente V, Francia (1305-1314). 196.- Juan XXII (1316-1334). 197.- Benedicto XII (1335-1342). 198.- Clemente VI (1342-1352). 199.- Inocencio VI (1352-1362). 200.- Beato Urbano V (1362-1370). 201.- Gregorio XI (Francia) (1371-1378). 202.- Urbano VI (1378-1389). Los Papas regresan a Roma: 203.- Bonifacio IX (1389-1404). 204.- Inocencio VII (1404-1406). 205.- Gregorio XII (1406-1417) (renunciò Julio 4, 1415). 206.- Martin V (1417-1431). 207.- Eugenio IV (1431-1447). 208.- Nicolás V (1447-1455). 209.- Calixto III (España) (1455-1458). 210.- Pío II (1458-1464). 211.- Pablo II (1464-1471). 212.- Sixto IV (1471-1484). 213.- Inocencio VIII (1484-1492). 214.- Alejandro VI (España) (1492-1503). 215.- Pío III (1503). 216.- Julio II (1503-1513). 217.- León X (1513-1521). 218.- Adrián VI (Holanda) (1522-1523). 219.- Clemente VII (1523-1534). 220.- Pablo III (1534-1549). 221.- Julio III (1550-1555). 222.- Marcelo II (1555). 223.- Pablo IV (1555-1559). 224.- Pío IV (1560-1565). 225.- San Pío V (1566-1572). 226.- Gregorio XIII (1572-1585). 227.- Sixto V (1585-1590). 228.- Urbano VII (1590). 229.- Gregorio XIV (1590-1591). 230.- Inocencio IX (1591). 231.- Clemente VIII (1592-1605). 232.- León XI (1605). 233.- Pablo V (1605-1621). 234.- Gregorio XV (1621-1623). 235.- Urbano VIII (1623-1644). 236.- Inocencio X (1644-1655). 237.- Alejandro VII (1655-1667). 238.- Clemente IX (1667-1669). 239.- Clemente X (1670-1676). 240.- Beato Inocencio XI (1676-1689). 241.- Alejandro VIII (1689-1691). 242.- Inocencio XII (1691-1700). 243.- Clemente XI (1700-1721). 244.- Inocencio XIII (1721-1724). 245.- Benedicto XIII (1724-1730). 246.- Clemente XII (1730-1740). 247.- Benedicto XIV (1740-1758). 248.- Clemente XIII (1758-1769). 249.- Clemente XIV (1769-1774). 250.- Pío VI (1775-1799). 251.- Pío VII (1800-1823). 252.- León XII (1823-1829). 253.- Pío VIII (1829-1830). 254.- Gregorio XVI (1831-1846). 255.- Pío IX (1846-1878). 256.- León XIII (1878-1903). 257.- San Pío X (1903-1914). 258.- Benedicto XV (1914-1922). 259.- Pío XI (Febrero 12, 1922- Febrero 10, 1939). 260.- Pío XII (1939-1958). 261.- Juan XXIII (1959-1963). 262.- Pablo VI (1963-1978). 263.- Juan Pablo I (1978). 264.- Juan Pablo II (Polonia) (Octubre 16, 1978-2005). 265.- Benedicto XVI (Alemania) (Abril 19, 2005- ).

La Iglesia Católica es la única que, desde su fundación hasta hoy, (2000 años) no presenta ninguna laguna en su continuidad. Tenemos dos mil años de historia, dos mil años de vida… Dos mil años con a presencia de Jesús en medio de nosotros… ¿Qué otra iglesia puede decir lo mismo?... Ninguna!!!...